Miguel ngel

Miguel ngel

Eugene Muntz

     

электронная книга



Дата выхода: декабрь 2013
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Miguel ngel, al igual que Leonardo, fue un hombre de muchos talentos: escultor, arquitecto, pintor y poeta; logr expresar la apoteosis del movimiento muscular, que para l era la manifestacin fsica de la pasin. Llev el arte del dibujo a los lmites extremos de sus posibilidades, estirndolo, moldendolo y hasta retorcindolo. En las pinturas de Miguel ngel no hay paisajes de ningn tipo. Todas las emociones, todas las pasiones, todos los pensamientos de la humanidad estn personificados, para l, en los cuerpos desnudos de hombres y mujeres. Rara vez concibi formas humanas en poses de inmovilidad o reposo. Miguel ngel se convirti en pintor para poder expresar en un medio ms maleable lo que su alma de titn senta, lo que su imaginacin de escultor vea, pero que la escultura le negaba. As, este admirable escultor se convirti en el creador de la decoracin ms lrica y pica jams contemplada: la Capilla Sixtina en el Vaticano. La vastedad de su ingenio est plasmada sobre esta vasta superficie de ms de 900 metros cuadrados. Cuenta con 343 figuras principales con una prodigiosa variedad de expresiones, muchas de ellas en tamao colosal, y adems un gran nmero de personajes secundarios que se introdujeron como efecto decorativo. El creador de este gigantesco diseo tena slo treinta y cuatro aos cuando comenz su trabajo. Miguel ngel nos obliga a ampliar nuestro concepto de lo que es la belleza. Para los griegos se trataba de la perfeccin fsica, pero a Miguel ngel poco le importaba la belleza fsica, salvo en ciertas ocasiones, como en el caso de su pintura de Adn en la capilla Sixtina y de sus esculturas de la Piet. Aunque era maestro en anatoma y en las leyes de la composicin, se atrevi a hacer caso omiso de ambas cuando le era necesario para expresar sus ideas: exageraba los msculos en sus figuras y hasta las colocaba en posiciones que el cuerpo humano no puede asumir naturalmente. En una de sus ltimas pintura, El juicio final en el muro del fondo de la Capilla Sixtina, dej fluir su alma como en un torrente. Miguel ngel fue el primero en hacer que la figura humana expresara una amplia variedad de emociones. En sus manos, la emocin se converta en un instrumento que poda tocar para extraer temas y armonas de infinita diversidad. Sus figuras llevan nuestra imaginacin mucho ms all del significado personal de los nombres que poseen.

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